Viví
una carnicería, una experiencia que jamás pensé sufrir en un país que me vio
crecer, que fue mi sueño y esperanza. Que de alguna manera aún lo es. Durante
casi 12 horas, Caracas vivió un asedio militar de proporciones monstruosas.
Funcionarios de la GNB en compañía de miembros de colectivos armados, atacaron
manifestaciones pacíficas a lo largo y ancho del país, arrojando bombas
lacrimógenas y disparando a quemarropa. También, hubo detenciones fraudulentas,
invasiones a propiedad privada, destrucción de bienes y ejecuciones públicas.
En otras palabras, sufrimos una campaña militar de exterminio a toda ley.
¿Exagero?
Ya conozco todos los argumentos de mis pocos conocidos Chavistas que aún me
leen por aquí. Me insistirán sobre "de la cuarta", me hablarán del
Once de Abril. O quizás, invocarán al 27 de Febrero como fecha mítica que les
permite justificar cualquier hecho histórico posterior. Pero una cosa está
clara: Lo que ocurrió anoche no solo supera con creces al 27 de Febrero en los
aspectos que tanto se le criticó sino que abre un nuevo precedente histórico:
La del Estado represor y asesino que se regodea de serlo.
Luego
de lo ocurrido anoche, usted que me lee, de la tendencia política que sea, es
tan rehén como yo lo soy de un país sin garantías y de un Estado que no respeta
los mínimos extremos de ley. Un país donde ya no se guardan las mínimas formas
democráticas. Usted se encuentra tan en riesgo como yo de ser detenido,
maltratado, asesinado por la fuerza pública por cualquier razón que esgrima. Usted
ya no se encuentra seguro en ningún lugar de este país. Porque el Estado
Venezolano violó toda norma en un intento de auto preservarse y de complacer a
las fuerzas radicales que lo apoyan.
Lo
sepa o no, usted HOY es una víctima. Y lo será cara día en que tenga que bajar
la cabeza de miedo. Lo será cada día en que deba hacer cola para comprar lo que
necesita. Lo será incluso, justificando lo injustificable para no admitir la
estafa histórica que sufre.
Esto
ya no es ricos contra pobres, ideologías contrapuestas. Esto ya no es chavismo
y oposición. Esto es el Estado todopoderoso destrozando a toda oposición y
divergencia y eso lo incluirá a usted, incluso si es indiferente. Eso incluye
cada día, cada hora, que este régimen utilice la fuerza para apuntalarse y lo
haga por medio de la fuerza.
¿No lo
sabe? Usted simplemente es una pieza electoral. Y unas nuevas elecciones se
encuentran a dos años de distancia.
Así
que asúmalo, ciudadano de la tolda que sea, estamos juntos en esta tragedia
nacional.