No quise escribir de forma instantánea sobre los
atentados terroristas del viernes 13N porque me dio shock esa situación y
vinieron ideas a mi mente nada constructivas, ideas que no deben ver la luz y
que desaparecen. La razón debe imponerse siempre.
También esperé ver bien que fue lo que ocurrió, pasé
mucho tiempo leyendo, viendo videos, observando las reacciones de líderes y
figuras mundiales; es importante contextualizar todo antes de emitir un juicio,
sí, un juico; porque ante estos sucesos toda opinión enjuicia. La razón debe
imponerse.
Todo acto terrorista va a tener de trasfondo múltiples
excusas, motivos le dirían otros; analizar la motivación de los ataques es entrar
en la realidad psicosocial del terrorista; algo imposible para mí y para la
mayoría de ustedes porque no estamos en esa realidad, ni la realidad cultural,
ni social ni religiosa; mucho menos emocional e intelectual de quien decide
hacer estas atrocidades. Personas que son muy inteligentes, si no, no tuvieran
éxito, pero profundamente irracionales, por eso la razón debe imponerse.
El terrorismo islámico y su cara más grotesca, Estado
Islámico [ISIS por sus siglas], toman el concepto de la “Guerra Santa” para
hacer crueldades; pudiéramos decir que es lógico que en esto que llamamos
occidente se levante un sentimiento anti-islámico. Sin embargo, verlo de esa
forma no me parece razonable por dos razones.
Si comparamos el número de terroristas y quienes los
apoyan con respecto al número de practicantes del Islam a nivel global,
veríamos que son una minoría. La razón debe imponerse.
Si observamos quienes son los principales afectados por
el fundamentalismo islámico veríamos que son los mismos países musulmanes.
Muchos de ellos sufriendo de los crímenes de ISIS. La razón debe imponerse.
Por otro lado, ver la avanzada terrorista en Europa como
una guerra de oriente contra occidente es equivocado. Asia es muy grande,
China, Japón, etc. son parte de oriente y no andan en eso; y en cuanto al Medio
Oriente, no veo ningún gobierno haciendo ataques a países europeos, los
terroristas no lideran sus países, no los representan. Hay que dejar esto
claro, la razón debe imponerse.
Tristemente, los conflictos en Medio Oriente trajeron una
ola migratoria a Europa, y, aunque lo neguemos y no lo aceptemos, se infiltran
elementos terroristas; por eso me distancio de la posición absurda de que no
existen fronteras y los países con desarrollo deben acoger refugiados. En mi
opinión, la mejor ayuda que pueden recibir las víctimas de los conflictos
nacionales es la SOLUCIÓN DE LOS CONFLICTOS. Seguir acogiendo refugiados y
dilatar la solución a esos conflictos es condenar a esos países a la violencia
y al atraso; problematizar las economías y sociedades de los países que los
acogen; y aumentar la probabilidad de la presencia de terroristas. La razón
debe imponerse.
Por eso, de manera individual y consciente, apoyo la
intervención militar trasnacional en Siria y en cualquier país donde ISIS
exista, como ideal y organización no debe existir. Ya basta, el mundo ha sido
permisivo; miles de personas sufren y mueren vilmente por la debilidad de los
gobiernos con capacidad de solucionar. La razón debe imponerse.
NO me sumo a las tendencias de las redes sociales de
rezar por países y víctimas, que seguramente serán ciertas porque muchísima
gente reza y ora. No me sumo porque los terroristas también oran, le oran a Alá
antes de cometer sus atrocidades, y dudo que orando a Jehová se detengan, ni
las oraciones traerán de vuelta a las víctimas, si las oraciones sirvieran, en
este round Alá le ganó a Yahveh.
También observé detenidamente las reacciones de los
venezolanos con respecto a los ataques terroristas, que quedé infelizmente
sorprendido. Infelizmente porque queda de nuevo al descubierto nuestro talante
ignorante de vernos el ombligo y pretender que la opinión es verdad, La razón
debe imponerse.
Comparar terrorismo con los crímenes del hampa común u
organizada, o compararlo con violencia política, o compararlo con violaciones
derechos humanos, o compararlo con crímenes de guerra; son errores que se dan
por ignorancia, nunca nos enseñan de eso; y ciertamente no hemos vivido la
guerra y el terrorismo como para siquiera comprenderlo; pero, como sí hemos
vivido violencia política, violaciones de derechos humanos y sufrido al hampa
en todas sus formas tendemos a colocar nuestros problemas y realidad en el
primer orden; y muy a la venezolana, queremos ganar… La arrogancia de la
ignorancia es peligrosa, por eso estamos como estamos. La razón debe imponerse.
Solo para ilustrar:
Osama Bin Laden era terrorista.
Ernesto “Ché” Guevara era insurgente.
Pablo Escobar Gaviria era delincuente.
George Patton era militar.
Adolfo Hitler era dictador.
Si usted no puede encontrar las diferencias de forma,
método, objetivos y fondo entre estos personajes, seguramente su opinión sobre
cualquier acto de violencia será desajustada; si puede entender la diferencia,
lo felicito, la razón debe imponerse.
Como venezolano vivo y asumo nuestros problemas, me afectan las injusticias que vivimos a diario; estoy sensibilizado y en movimiento al respecto; eso no me limita de sentirme afectado, sensibilizado y a movilizarme como humano cuando hay un crimen contra la humanidad, no hay contradicción al respecto, soy venezolano y vivo Venezuela, soy humano y vivo el Planeta Tierra. Tengo el derecho, aunque yo lo siento como deber, de molestarme por las injusticias donde ocurran, a rechazar la vileza y los abusos sin sentido, a reñirme con la deshumanización y los intereses oscuros, a detestarlos con todas mis fuerzas. Quien no pueda entenderlo no visualiza su posición en su país ni el mundo; y el mundo va más allá de lo que crea que es su verdad. La razón debe imponerse.
Como venezolano vivo y asumo nuestros problemas, me afectan las injusticias que vivimos a diario; estoy sensibilizado y en movimiento al respecto; eso no me limita de sentirme afectado, sensibilizado y a movilizarme como humano cuando hay un crimen contra la humanidad, no hay contradicción al respecto, soy venezolano y vivo Venezuela, soy humano y vivo el Planeta Tierra. Tengo el derecho, aunque yo lo siento como deber, de molestarme por las injusticias donde ocurran, a rechazar la vileza y los abusos sin sentido, a reñirme con la deshumanización y los intereses oscuros, a detestarlos con todas mis fuerzas. Quien no pueda entenderlo no visualiza su posición en su país ni el mundo; y el mundo va más allá de lo que crea que es su verdad. La razón debe imponerse.
Nunca me ha gustado desayunar flores, no soy de los que
piensa que “La violencia es el arma de los que no tiene razón”, en este momento
lo razonable es levantar las armas contra ISIS, liquidar a esa organización y a
ese ideal. De la misma forma creo que que en Venezuela tarde o temprano será obligatorio levantar las armas contra el hampa y eliminarla.